El Diablo es mi Copiloto

Mamita, no corras

Por: HL

Permítanme todos. Es el mes de la madre, y a uno que es corazón de abuelita, estos eventos le retuercen el corazón.

Homenajes a madres ejemplares del último tiempo pueden haber por doquier. En cualquier momento saldrá por la tele la biografía de Sonia Fried, la mediática mamá del campeón olímpico chileno, Nicolás Massú.

Esperémos un poquito, que ya viene el programa propio de Teresa Muchnick, la madre de Vivi Kreutzberger, y como plus, es esposa de Don Francisco, por lo tanto, viene para seguir con el clan.

Ya tenemos la autobiografía de Carlita Ochoa, madre de María José ¿o era Josefa? ¿O Josefina?, en fin, sabemos que la niña es Pichara ¿o no?.

Francisca García Huidobro, mamita soltera, también. La prensa maquiavélica la ha destrozado por culpa de la versión humana de Ungenio, el amigo de Condorito.

La Pampita. Cuyo apodo ahora aparece sin comillas, ya es ultra famosa. Bueno, quizás es la mamita con suerte, pues tiene a uno de los galanes más cotizados de mi Chile querido y que más encima, le responde.

Cómo olvidar a Yazmín Valdés, no pues. La "Yayita" de carne y hueso (en la serie de "Condorito" que lleva seis años de espera por un canal que quiera transmitirlo), y su odisea con el "amo de los realitys" del 13. Finalmente, Quesille cumplió con su deber de ser buen papá. Merece celebrar su día en un par de meses.

La Jennycita. La Warner. No. No diremos nada sobre lo que han dicho algunos de que ya tiene su potrillito. No. Ella es una madre respetable, como todas las que estamos nombrando. Trabaja bien, gana su plata, y tiene un marido que hasta ahora parece ser buena gente. Bien por la conductora de S.Q.P.

Un caso aparte es la madre del señor Rubén Selman. Todavía los hinchas colocolinos la saludan a la distancia por la expulsión del "Mago" Valdivia en el partido con la Católica. Es un saludo recurrente en los albos.

Epa! No puedo dejar pasar a Raquel Argandoña. Vamos. Se sacó la mugre para ganarse el codiciado milloncito de "Vértigo Extremo" y así pagarle el cumpleaños más parafernálico de la historia a Raquelita. Es justo, cumple 15 años, y y nunca más se cumplen 15. Ni tampoco 16 ni 17 y así. En fin.

Y cómo no. Michelle Bachelet. La madre de la patria. Muchos de sus hijos la quieren. Otros no. Siempre hay hijos rebeldes. Más cuando en el árbol genético aparece Ricardo, que al principio era el abuelo buena onda, que regaloneaba a diestra y siniestra y que ahora se le acusa de negligencia en casos escabrosos como el patio 29, la contaminación y el Plan TranSantiago.

De todas formas, al abuelo Ricardo no le alcanza para ser como el "Tata". Porque éste último tenía preferencias por algunos nietos y de los otros ni siquiera se acordaba. Abuelo Ricardo trató de hacerlo bien para todos, en especial para eso nietecillos con futuro. Esos que se llaman empresarios.

Volviendo a mamá Bachelet. Tiene mucho que hacer. Sobre todo con lo que está en boca de todos esta semana: la contaminación. ¿Le pido un favor? Mamita, no corras. Te puedes ahogar.

Un gran "Te amo" para mi madre, a quien le llegarán saludos cordiales si es que alguno de los aludidos lee esto por casualidad.

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