
Mi primera vez
Por: F
Sí, debo confesarlo, es la primera vez que paso el año nuevo sin ninguno de los pensionistas y lejos de ese lugar; pero lejos, nada de Viña y los famosos juegos pirotécnicos que tanta admiración causan.
Ya llevo seis días fuera de la pensión y hay cosas que sí se valoran más. Tu cama, las personas, compartir con ellas, la comida que estás acostumbrado a comer, los olores y sabores que ya conoces, el clima e incluso el lugar.
La travesía de la vida me dio la oportunidad de venir a dármelas de “temporero”. Nada fácil ese estilo de vida y más sacrificado de lo que en algún momento pensé. Se trabaja de ocho a ocho, con el sol que caracteriza al Valle del Elqui. El cortar uvas y hacer bandejas llenas de ellas va haciendo que todo parezca monótono, lo que hace que estés pensando mucho y en especial en esas cosas que te remueven, que son malas o que simplemente te dejan helado o mirándote a un espejo con lo que más te duele o asusta. Según mi doctor Lars Gerhard, es como una terapia satánica que cada uno se hace, pero necesaria para aprender de uno y conocerse.
Sí, por momentos he tenido mucho miedo de lo que he pensado o he imaginado. El tener mucho tiempo la mente sin ocupar y sólo hacer algo mecánico, tipo revolución industrial, te da una perspectiva inédita y real de las cosas por las cuales te haces rodear.
A mis amigos los echo de menos, a mi familia, a mi Juanita y a mi mundo. Pero como dicen acá, eso es un mundo lejano al cual aún no puedo acceder, ya que aún no termino conmigo. Es más, aún falta “darle muchos golpes a mi conocimiento”.
Pero de la pensión, acá hay otras comodidades y otro contexto. Comparto pieza con mi mejor amigo. Dormimos en un camarote cada uno, ambos abajo y arriba tenemos alguna ropa y mochilas. La casa está rodeada por tres piscinas, y tres casas, por lo que para refrescarse hay donde. Estamos entre dos cerros, uno de ellos se llama “Mamalluca”, donde se encuentra el observatorio. En el cerro hay mucha gente increíble y de mucha energía, por lo que la buena onda se respira e incluso se materializa.
Los dueños de la pensión están construyendo una terraza al lado de la piscina con el fin de poder recibir a más gente a la hora de alguna visita. Los dueños se han portado increíble con nosotros, por lo que estamos agradecidos. Sobre jefes, debo decir que en la pega tengo una jefa, Jenny. Es simpática y amorosa. Nos ha ayudado en lo que ha podido, pero aún no nos sentimos dotados de los conocimientos de cómo ser un mejor cortador de uvas.
Como siempre dedico un tema a lo que escribo, hoy lo haré con un ritmo típico del ambiente de temporero o mejor dicho “trabajador agrícola de temporada”. El grupo es Rivales de Corazón y los iremos a ver al “baile” el 6 de enero. Dicen acá que son furor y lo máximo. Habrá que verlo.
Un saludo a todos
Sí, debo confesarlo, es la primera vez que paso el año nuevo sin ninguno de los pensionistas y lejos de ese lugar; pero lejos, nada de Viña y los famosos juegos pirotécnicos que tanta admiración causan.
Ya llevo seis días fuera de la pensión y hay cosas que sí se valoran más. Tu cama, las personas, compartir con ellas, la comida que estás acostumbrado a comer, los olores y sabores que ya conoces, el clima e incluso el lugar.
La travesía de la vida me dio la oportunidad de venir a dármelas de “temporero”. Nada fácil ese estilo de vida y más sacrificado de lo que en algún momento pensé. Se trabaja de ocho a ocho, con el sol que caracteriza al Valle del Elqui. El cortar uvas y hacer bandejas llenas de ellas va haciendo que todo parezca monótono, lo que hace que estés pensando mucho y en especial en esas cosas que te remueven, que son malas o que simplemente te dejan helado o mirándote a un espejo con lo que más te duele o asusta. Según mi doctor Lars Gerhard, es como una terapia satánica que cada uno se hace, pero necesaria para aprender de uno y conocerse.
Sí, por momentos he tenido mucho miedo de lo que he pensado o he imaginado. El tener mucho tiempo la mente sin ocupar y sólo hacer algo mecánico, tipo revolución industrial, te da una perspectiva inédita y real de las cosas por las cuales te haces rodear.
A mis amigos los echo de menos, a mi familia, a mi Juanita y a mi mundo. Pero como dicen acá, eso es un mundo lejano al cual aún no puedo acceder, ya que aún no termino conmigo. Es más, aún falta “darle muchos golpes a mi conocimiento”.
Pero de la pensión, acá hay otras comodidades y otro contexto. Comparto pieza con mi mejor amigo. Dormimos en un camarote cada uno, ambos abajo y arriba tenemos alguna ropa y mochilas. La casa está rodeada por tres piscinas, y tres casas, por lo que para refrescarse hay donde. Estamos entre dos cerros, uno de ellos se llama “Mamalluca”, donde se encuentra el observatorio. En el cerro hay mucha gente increíble y de mucha energía, por lo que la buena onda se respira e incluso se materializa.
Los dueños de la pensión están construyendo una terraza al lado de la piscina con el fin de poder recibir a más gente a la hora de alguna visita. Los dueños se han portado increíble con nosotros, por lo que estamos agradecidos. Sobre jefes, debo decir que en la pega tengo una jefa, Jenny. Es simpática y amorosa. Nos ha ayudado en lo que ha podido, pero aún no nos sentimos dotados de los conocimientos de cómo ser un mejor cortador de uvas.
Como siempre dedico un tema a lo que escribo, hoy lo haré con un ritmo típico del ambiente de temporero o mejor dicho “trabajador agrícola de temporada”. El grupo es Rivales de Corazón y los iremos a ver al “baile” el 6 de enero. Dicen acá que son furor y lo máximo. Habrá que verlo.
Un saludo a todos
---------------------------------------------
7 Vómitos:
Yo quiero verte pues
ya queda menos
fuerza
Doña Juanita
Yo quiero que tu columna se llame "el confesionario".
Aguante pipe!
HL, el desaparecido.
Amigos de Wakatela: Los quiero invitar a que nos ayuden en un campaña a favor de una amiga blogger que necesita costear una operación a su columna. Revisen mi blog para mayor información.
buen texto
crei q eran de stgo... no?
mmmm
ya no escriben muxio
me gustaba leer
...
eso
bye
Animo Pipe, que bueno que sigan escribiendo. Un beso
Carolina
Hola a todos!... Cómo están?
Bueno, pronto enviaré otro post.. gracias a todos y a "dane"
Nos vemos!
F
Que bueno que estes lejos por un tiempo, a ver si así valoras lo que te han dado, y si trabajaste de verdad, ojalá que le tomes el real peso a lo que cuesta ganar los piticlines para comprarle al niño lo que pide, y tambien a no mirar en menos ningun oficio o trabajo. En todo caso espero que disfrutes del valle y sus alrededores, dicen que es hermoso, pero a mi me gusta el verde del sur. Saludos.
Publicar un comentario
<< Inicio